domingo, 20 de agosto de 2006

LA HISTORIA DEL "108"

Alfredo Stroessner gobernó Paraguay durante casi cuatro décadas, fue amo y señor de la vida y de la muerte en su país y felizmente murió débil, enfermo y exiliado a los 93 años de edad.
*
Fue uno de los tantos modelos de dictador que sirvieron como inspiración para las mejores novelas de la literatura latinoamericana. Fácil de rastrear en las páginas de "El Otoño del Patriarca" de García Márquez. Material de primera mano para "Yo, el Supremo" de Roa Bastos. Personificación en carne y hueso de "El Señor Presidente" de M. A. Asturias.
*
Se llevó consigo un oscuro récord: el de permanecer 35 años en el gobierno a base de elecciones fraudulentas, corrupción en el manejo de los fondos públicos y un terrible aparato represor que asesinó o envió al exilio a miles de sus compatriotas.
*
Hijo de... (oleeeee!) un contador alemán y una campesina paraguaya, había nacido el 3 de noviembre de 1912 (¡escorpiano!) en la ciudad de Encarnación. Hizo una carrera meteórica en el ejército, se instruyó militarmente en Brasil y participó en la Guerra del Chaco, que enfrentó a Paraguay con Bolivia. En 1951 se afilió al Partido Colorado, que encabezó durante décadas y, con el guiño de EEUU y el apoyo de la oligarquía y la iglesia, encabezó un golpe de estado en 1954, que derrocó a Federico Chávez. Desde entonces, presidió un gobierno de facto que se camufló bajo la fachada de elecciones falsamente democráticas en las cuales, como único candidato, ganaba irremediablemente.
*
Participó activamente del PLAN CÓNDOR con el que las dictaduras de la región coordinaron acciones para eliminar a la oposición. Durante su gobierno, fueron asesinados 4000 opositores y otros tantos conocieron los rigores de las cárceles del régimen. Para no desentonar con el resto de sus "colegas", también fue acusado de corrupción (sobre todo en lo referido a la construcción de las represas binacionales de Yacyretá y de Itaipú). Tampoco resistió la tentación de inaugurar estatuas en su honor ni de ponerle su nombre a una de las principales ciudades del país (Puerto Stroessner, ahora Ciudad del Este).
*
Su reinado absoluto concluyó el 3 de febrero de 1989.
*
Stroessner rediseñó la cultura del país eliminando todo posible elemento de diferenciación de su “paraguayan way of life” e implantando sistemáticamente costumbres y paradigmas que sirviesen a mantener su régimen. Esto a través primero del asesinato político, y luego a través del borrado de la memoria colectiva, con sus “políticas educativas”.
*
Los gays no fueron la excepción y protagonizaron las más oscuras páginas de la represión stronista. Uno de los casos más representativos sigue latente, hasta nuestros días, en la forma de un número: el 108.
*
Bernardo Aranda era un locutor de radio muy conocido en Asunción, capital de Paraguay, que fue asesinado en la noche del 31 de agosto de 1959, en su casa. Alertados por una explosión, los vecinos ingresaron y encontraron un incendio que consumía el colchón y parte de la pared de la habitación. Entre los restos del colchón se hallaba el cuerpo de Bernardo Aranda, de 26 años. Curiosamente también se hallaba, en la habitación, un tocadiscos sonando a todo volumen.
*
El crimen rápidamente tomó carácter público. La prensa, entre la propaganda oficial que hacía diariamente, iba dando datos sobre el avance de la “investigación”. El 2 de septiembre, publicaban en el diario El PAIS, que la policía tenía demoradas e incomunicadas a cinco personas ligadas al caso, y que se tenía la certeza de que el mismo tenía “tintes pasionales”. A partir de allí, las crónicas dan cuenta de una verdadera caza de brujas en la que, al más puro estilo fascista, eran detenidas personas de la cuales se sospechaba que eran parte de la “logia de amorales que ponían en peligro la raza de hombres que había sido defendida por los héroes de la patria”. En este punto, ya se habían realizado varias redadas en lugares de baile, quedando detenidos finalmente 108 varones, número que queda, desde entonces y hasta hoy, como sinónimo de homosexual en Paraguay. Esta y otras ridículas y amarillistas expresiones servían para demonizar a los gays y empujar a la gente a denunciar a cualquier sospechoso, marcando de esa manera, con miedo y terror, la sola idea de la homosexualidad.
*
Lo único concreto que queda del caso es el terror infundido a la población a lo largo de esos meses, en los que incluso se llegó a solicitar que se conformara un escuadrón especial para perseguir y exterminar la amenaza de los sodomita.
*
A pesar de que las crónicas hablaron de que se había encontrado al responsable del asesinato, nunca revelaron el nombre. La razón: “seguridad dispuesta por la policía”. ¿Seguridad para quién? ¿Para los policías que lo mataron después de torturarlo, tal vez?
*
Las publicaciones hechas por los periódicos de la época dan cuenta del infierno que vivieron los involucrados y empezaron a dar una idea de los años que vendrían para toda Latinoamérica.
*
*********************************************************
*
En la foto: Don Alfredo con dos de sus mejores "amigos y colegas" de la época. No sé si los tienen... je je je.
*
Esto fue todo por hoy. Desde la Misteriosa Buenos Aires, los saluda Víktor Huije, tan solo un aspirante a chica Almodóvar.
*
*********************************************************

1 comentario:

Señorita Cosmo dijo...

Ay nonono! "felizmente murió débil, exiliado y enfermo a los 93 años de edad" no es felicidad, más si el exilio fue en una mansión en Brasil junto a su familia.
Débil y enfermo a los 93 es algo posible. Debería haber muerto preso, y encadenado a los 93 años de edad o más. Yo hubiese votado por que se le prolongue todo lo posible la vida (y no dije torturas, eh, ojo!... ja!).

Novelas de Carlos Ruiz Zafón