UN DÍA MUY PARTICULAR

Caramba, creo que recordaré el día de hoy durante mucho tiempo. Y eso que recién son las diez de la mañana.

Veamos... ¿por dónde empiezo?

SUDOKU:
Hace unos meses, mi amigo Bellota Caravaggio mencionó la existencia de un juego de destreza mental llamado SUDOKU que (a su criterio) es "adictivo". Como buen curioso que soy, busqué información de inmediato y llegué a la misma conclusión que mi amigo y predecesor en la Secretaría de GLOBA Diversidad. Ante los primeros fracasos, hice acopio de bibliografía ad hoc para interiorizarme en los secretos de tácticas y estrategias que me permitieran alcanzar un mejor handicap. Sin embargo, a pesar de que no soy ningún negado para el manejo de los números y las probabilidades, durante los últimos meses no había sido capaz de resolver un solo juego.
Pero nada es para siempre.
Hoy, a las siete de la mañana, luego de que mi señor marido partiera hacia la oficina, ya despabilado y sin poder retomar el sueño, insistí con un juego de SUDOKU con el que venía lidiando desde hacía dos días. Con más ánimos de matar el tiempo que esperanzas de resolverlo. Pero parece que hoy las Musas están de paseo por las Lomas del Mirador y mágicamente, como si una voz divina me dictara los números y el orden en que debía ponerlos, la planilla se fue llenando con tal facilidad que todavía me pasma.
Que quede claro: EN EL DÍA DE HOY HE LOGRADO RESOLVER MI PRIMER SUDOKU. ¿No es maravilloso? Sí, LO ES.

IMPERIO G:
Satisfecho de semejante logro, sopesé la idea de afrontar la resolución de un nuevo juego. Pero no hay que tentar a la suerte, por lo cual dejé el SUDOKU a un lado y me puse a leer el último número de la revista "Imperio G", publicación porteña orientada al público gay-lésbico.
La compramos el sábado a la noche. Mi amigo Diego me había dicho que yo aparecía en una foto y, como vanidad no me falta, me tiré de cabeza en el primer kiosco de diarios que encontramos. No fue desilusión, pero la foto de marras no era otra que la última que publiqué en este mismo blog el día 9 de mayo, ya que la nota trataba sobre el encuentro de organizaciones LGBT de Rosario.
La revista quedó entonces sobre el escritorio, perdida entre decenas de otros papeles, vasos, ropa sucia y discos varios... todos componentes del habitual caos doméstico de nuestra habitación.
Esta mañana, a las ocho de la mañana, como el SUDOKU quedaba descartado y no se me ocurría nada interesante para escribir, la alternativa fue leer. Retomé la Imperio y le di primero una hojeada rápida. Concuerdo con mi marido en que el chico que figura en el Portfolio de este mes bien merece una escapadita hasta los pagos de Suipacha, ciudad de la que (según reza en la publicación) es oriundo. En la página 34, el amigo Lucho Bordegaray publicó la noticia del concurso fotográfico que organiza GLOBA Diversidad (y del cual ya les hablaré en detalle). Luego leí con atención la nota sobre el Encuentro de Rosario escrita por Bruno Bimbi. También le dediqué algunos minutos a una nota que moraliza sobre los hábitos sexuales en los baños públicos (de la que seguramente también hablaré en algún momento) y, a falta de mejor lectura, ya dejaba de lado la revista cuando se me ocurrió encarar la editorial.
Tras leer el primer párrafo, me quedaba claro que el nudo del texto aludiría al más que probable triunfo de la derecha encarnada por Mauricio Macri en la segunda vuelta de las elecciones de la Capital. Hablaba del "que se vayan todos", de corrupción a nivel político, empresarial y social, de la violencia en el fútbol... hasta que, en un momento dado, el texto dio un giro inesperado para adoptar el siguiente discurso:
"En este panorama, GLOBA Diversidad, una organización que trabaja por los derechos de las minorías sexuales en el ámbito de la provincia de Buenos Aires, aceptó la renuncia de su presidente tras negarse éste a rendir una información que se le exigía, reacomodó los cargos en su comisión directiva e hizo pública esa situación (...) Es decir: un puñado de dirigentes puso a la organización por encima de quienes la dirigen. Que es donde las organizaciones deben estar, aunque no resulte algo tan frecuente".
¡Yo no lo podía creer! ESTABA HABLANDO DE NOSOTROS.
La editorial hace referencia a una pequeña gran crisis institucional de la cual GLOBA Diversidad aun no termina de reponerse y de la que no había querido hablar en estas páginas a raíz de que ya estoy harto de hablar de eso. Un desencuentro ideológico y metodológico con uno de los fundadores de la asociación que terminó en su renuncia, posterior arrepentimiento y actual guerra mediática por parte de este "caballero" que quiere demostrar que es él el que la tiene más larga.
Más allá de las grandezas y chiquiteces de cada uno de los involucrados, parece ser que el hecho hizo ruido más allá de nuestro radio de influencia. O sea: en solo un año de vida, GLOBA Diversidad ya goza de una entidad que no deja de asombrar a los que soñamos tiempo atrás con una asociación seria y transparente. Lamentablemente, no hemos podido escapar a los conflictos internos pero coincido con lo expresado en el párrafo final de la editorial:
"Es de desear que lo sucedido en GLOBA (Diversidad) sirva como ejemplo tanto para sus mismos miembros -en pos de una gestión transparente- como para el resto de las organizaciones sociales".

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Esto ha sido todo por hoy. Desde las callecitas de la siempre misteriosa ciudad de Buenos Aires se despide Víktor Huije, un cronista de su realidad que, en el día de la fecha, tiene miedo de salir de la cama: no sea cosa que tanta felicidad matutina sea malograda por una tarde contradictoria.