martes, 17 de julio de 2007

¿SÓLO PUBLICIDAD?

"La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida". Así dice la clásica canción de Rubén Blades.

Hace unos días, un amigo me comentó de la nueva publicidad del Banco Provincia. Que estaba bárbara, que por fin alguien se animaba a poner una travesti en pantalla, tratándola con respeto y fuera del estereotipo...

Esa misma noche, casi por casualidad, vi el mentado comercial. Un pueblito del interior, una calle de tierra, un auto que se detiene junto a dos señoras que charlan en la vereda y un señor añoso que se baja y se dirige a ellas con algo entre las manos. Los detalles los pueden disfrutar más abajo. Bien vale la pena darle un vistazo a esta joyita de la publicidad rioplatense.

La publicidad pertenece a la nueva campaña del Banco Provincia y es responsabilidad de Carlos Agulla y Ramiro Bacetti, aquellos publicitarios que marcaron época con los spots de "La llama que llama" y la campaña proselitista del tristemente célebre ex presidente Fernando De La Rua. ¿Se acuerdan?: "Y dicen que soy aburrido". En verdad, tendríamos que odiar la dupla, por habernos vendido semejante impresentable para el sillón de Rivadavia, pero parece que hasta los publicistas tienen derecho a reivindicarse de sus errores.


¿La vieron? ¿Les gustó? ¿Qué opinión les merece?

A mí, la primera pregunta que me surgió fue: ¿será una apertura de mente o sólo una estrategia comercial? Si alguna chica trans se presenta en la ventanilla del banco, le darían el crédito para que pudiera abrir su peluquería o lo que se le antojase abrir para ganarse la vida decentemente? Si alguno de nosotros y nosotras (gays y lesbianas) pretendiera una financiación, por ejemplo, para comprar nuestro nidito de amor, ¿accedería el banco a "hacérnosla más fácil"?

Ya sé que lo mío no excede el lugar común. Lo digo simplemente por si a alguno no se le ocurrió pensarlo. Lo expuso también Soledad Vallejos en el artículo que, en Página 12, le dedicó al tema. Recomiendo su lectura en el suplemento Las 12

Los que tenemos alguna historia en la larga y desgraciada crónica de la discriminación, tenemos derecho a sospechar. Afortunadamente también tenemos la esperanza de que este sea un nuevo y feliz paso hacia el respeto que nos merecemos. Un manera original y no traumática de pedirnos perdón por las humillaciones pasadas y no tanto.

**************************************************

Esto ha sido todo por hoy. Desde las callecitas de la siempre misteriosa Buenos Aires se despide Víktor Huije, un cronista de su realidad que sabe que esta historia es todavía muy utópica pero... ¡qué lindo sería que no lo fuera tanto!

1 comentario:

andrescataldo dijo...

llo jui parte del comite creatibo de ese comersial, la hidea jue mia i lo ise para captar mas puvlico gigigiggi hes una herstatejia de marquetin que me henseñaron en la hunibersidad de jarbar, al norte de haravia saudita (es una nueba cede que se habrio haya),
te hescrivo para disirte que si tienes provlemas en tu bida??? cientes que las cosas no tienen solusion?? crees qe no ay motibos para sigir bibiendo??? entra a mi blog y encontraras la solusion!!!!

libertyberto

Novelas de Carlos Ruiz Zafón